La huella que dejamos atrás

El Hotel “Mirador de Estrellas”, ubicado en un rincón costero mediterráneo, se encontraba en pleno auge. El bullicio en recepción era notorio, los murmullos de los huéspedes se mezclaban con la brisa marina que traía el rumor de las olas y movían las palmeras que lo franqueaban. Las buganvillas ponían la nota fucsia y verde de color y contraste con el blanco de la cal en la pared.

Parejas de la mano, niños jugando y todos encajando a la perfección, en un entorno de postal de esas que mandas a tus familiares y amigos para celebrar las vacaciones. Ana acababa de llegar a un paraíso con olor a sal y verano.

En el corazón del hotel, el restaurante “Sabor del Mar”, es el epicentro de la actividad. Ana, la influyente viajera noruega de la que os he hablado, había llegado de manera inesperada para explorar los encantos de este rincón del mundo, tan distinto a primera vista, a su tierra natal.

Lo que no imaginaba es que se encontraba a punto de experimentar algo más que una simple estancia en un magnífico hotel. No era el primero que visitaba en la zona, por otro lado, un destino elegido por muchos, pero que contaba con establecimientos en los que había tenido desagradables sorpresas en otras visitas.

Ana fue recibida con una cálida sonrisa por parte del personal, quienes la acompañaron a su mesa con vistas al mar. La sensación de bienestar la invadió por completo, pero no quiso dejarse llevar. La localización era estupenda, pero ¿habrá algo más? Pronto descubriría que sí.

Al hojear el menú, Ana notó algo peculiar: cada plato estaba etiquetado con el origen de los ingredientes y había una anotación sobre el compromiso del hotel con la sostenibilidad medioambiental. Intrigada y curiosa, decidió indagar más.

Durante la cena, tras notar varios miembros del restaurante, el interés de Ana, el encargado del restaurante se acercó y, encantado con la inquietud, le explicó con entusiasmo y una pizca de orgullo, cómo el hotel había implementado un innovador sistema de gestión de residuos, tanto orgánicos como inorgánicos, como parte de su plan de sostenibilidad.

“Mira Ana, son 6 las áreas en las que hemos trabajado para daros el mejor servicio del que somos capaces.”

1.     Cumplimiento normativo: El Hotel debe cumplir con las regulaciones medioambientales locales. Pero, ¿Por qué quedarnos ahí? Buscamos la excelencia por lo que debemos garantizar prácticas responsables en la operativa diaria. Es quienes somos… o quienes queremos ser.

2.     Reducción de costos: Cada plato elaborado con ingredientes frescos y locales, suponen que la inversión en sostenibilidad no solo es ética, sino también económicamente viable. La eficiencia en el manejo de los recursos no solo beneficiaba al medio ambiente, sino también a los resultados del negocio. Proximidad para un mejor servicio y para impactar en nuestra comunidad.

3.     Mejora de la imagen de marca: “La transparencia del hotel respecto a nuestro compromiso con el medio ambiente.” Esto resonó profundamente en Ana. La ausencia de “greenwashing” debe ser evidente, lo que refuerza la confianza en la marca y su percepción a nuestros huéspedes y comensales. Detesto esos carteles de “sostenible” que siguen usando elementos de “usar y tirar.”

4.     Eficiencia operativa: La fluidez con la que el restaurante gestionaba los residuos y los recursos impresionó a Ana. Desde la recolección hasta el tratamiento, todo estaba meticulosamente organizado para garantizar la máxima eficiencia operativa. “Fíjate que hemos implementado un sistema que nos permite salir de trabajar media hora antes a todos.” Los cuadrantes de turnos así lo refrendaban.

5.     Reducción del impacto ambiental: Mientras observaba las olas romper suavemente en la orilla, Ana se sintió reconfortada al saber que su experiencia gastronómica no solo era deliciosa, sino también respetuosa con el medio ambiente. La reducción del impacto ambiental del hotel era evidente en cada detalle. Desde las máquinas que eliminaban los residuos recirculando agua a las trituradoras de cristal que proponían menos transporte de residuos.

6.     Atracción y retención de clientes: Ana no tardó en darse cuenta de que había encontrado un verdadero tesoro en el Hotel Mirador de Estrellas. Su experiencia positiva no solo la instaba a regresar con amigos en el futuro, sino también a compartir su experiencia con sus seguidores de todo el mundo.

Al final de su estancia, Ana se despidió del hotel con una sonrisa en el rostro y un profundo agradecimiento en el corazón.

Su experiencia en el Hotel Mirador de Estrellas no solo había sido memorable, sino también transformadora. Y mientras se adentraba en el camino hacia su próximo destino, sabía que llevaría consigo la historia de un lugar donde la sostenibilidad era mucho más que una etiqueta, era una forma de vida.

Y de eso trata nuestra historia: De cuál es la huella que dejamos.

¿Cuál quieres que sea la tuya?

Andrea Muglemill

El Hospital que cura pacientes y al ecosistema

No son pocas las instituciones públicas y empresas privadas los que se enfrentan diariamente a la generación de grandes cantidades de residuos orgánicos, principalmente restos de alimentos, que a menudo terminan en vertederos. Sin embargo, existe un proyecto que busca abordar este problema de manera sostenible al convertir estos desechos en una fuente de energía renovable. En este sentido, el estudio de los procesos y materiales que se necesitan para la implementación de esta realidad, los trituradores de residuo orgánico desempeñan un papel fundamental al optimizar el residuo que permite la generación de biogás y reducir los tiempos de espera, así como la gestión del material.

Este innovador enfoque se ha implementado en un hospital de la comunidad de Madrid, donde se ha establecido una planta de biogás que aprovecha los residuos orgánicos para la generación de energía. Esta iniciativa se considera una de las primeras en Europa en adoptar esta tecnología en el mundo hospitalario, con el objetivo de reducir las emisiones de CO2, dar un nuevo propósito a los residuos alimentarios, contribuir a la preservación del medio ambiente y la salud en general.

El proyecto surgió durante una reunión de planificación, donde se discutió la preocupante cantidad de alimentos desechados a diario en el hospital. Fue entonces cuando se propuso la idea de convertir estos residuos orgánicos en biogás, una forma de energía renovable. Con la colaboración de una empresa especializada, se pusieron manos a la obra. Miguel Almendral, de Insinkerator España, subraya la importancia de los trituradores de residuo orgánico al señalar: “No solo se trata de realizar una gestión sostenible, sino de ser lo más eficientes posibles, para lograr amortizar la inversión más pronto que tarde”.

La planta de biogás se encuentra en las instalaciones del hospital y se abastece de los residuos alimentarios generados en el centro. En este caso, el hospital, que tiene un número limitado de camas, produce una cantidad considerable de residuos cada año. La inversión en esta tecnología ha demostrado ser económicamente viable.

El biogás producido en la planta se utiliza para alimentar las cocinas del hospital, lo que permite cocinar durante varias horas al día. Además de la generación de energía, el proceso también produce un fertilizante orgánico que se utiliza en áreas verdes, cerrando así un ciclo sostenible.

Este enfoque de economía circular ha llamado la atención de otros hospitales, tanto públicos como privados, con una capacidad superior. Estas iniciativas subrayan la importancia de que las instituciones de salud contribuyan a la sostenibilidad y reduzcan su huella de carbono, además de reducir sus costos energéticos.

Hoteles, como el instalado en Estepona hace no mucho y este nuevos hospital que se suma a la sostenibilidad, dan fe que se está produciendo un cambio en la gestión de nuestros residuos. “El concepto de basura ya ha cambiado. No sólo supone un elemento diferenciador , si no que ya no se entiende el futuro sin acometer el presente.” Nos decía también el director de operaciones de Insinkerator España.

En un contexto de creciente conciencia ambiental, proyectos como este demuestran que la sostenibilidad ya no es solo una tendencia, sino una realidad que puede mejorar tanto la salud del medio ambiente como la de la sociedad en general.

Miguel Almendral, director de operaciones de Insinkerator España

Los trituradores de cocina NO están prohibidos

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Hoy me siento en el despacho y lo primero que tengo en mi lista de tareas va a esperar. Hoy quiero comentar con vosotros algo por lo que hemos estado trabajando en Insinkerator España desde hace mucho tiempo. Bueno, me presento, soy Miguel Almendral, director de operaciones y desarrollo de marca de Insinkerator España, una sociedad que lleva trabajando en el mundo de los sistemas de gestión de residuos muchos años ya. Y no ha sido un trabajo fácil, pero supongo que ninguno lo es. Hemos tenido que vencer a la ignorancia sobre el producto y, por qué no decirlo, la mala fé de aquellos que entienden la mentira como forma de competencia.

Pero hoy es un día de celebración. Por eso me gustaría comentar con vosotros la aprobación por prate de la FEMP, de la Ordenanza Marco de Recogida de Residuos, que incluye la eliminación de la prohibición del uso de trituradores de cocina para la eliminación de residuos orgánicos. Esta medida será beneficiosa para el sistema productivo y las administraciones, ya que el 45% de la fracción del RSU es orgánico, lo que pasará a ser transportado por tuberías y gestionado por las EDAR en lugar de transportarse por camiones y gestionarse o no en vertederos, reduciendo así las emisiones de CO2 y mejorando la gestión de residuos.

Es un paso importante en la dirección correcta, especialmente porque los vertederos tienen los días contados, tal y como lo exige Europa.

No quiero terminar sin enfatizar que la gestión adecuada de los residuos es crucial para la protección del medio ambiente y la sostenibilidad de nuestras ciudades y comunidades. La eliminación de la prohibición de los trituradores de cocina es un paso importante hacia una gestión más sostenible de los residuos y la promoción de la economía circular.

Os dejo la normativa de la Federación de Municipios y Provincias para que la podáis consultar. Nos consta la adhesión de muchos municipios, entre ellos el de la capital.

Hoy es un día para felicitarnos todos. Un paso de la administración en pos de la ecología, la ciudadanía y el tejido productivo.

NORMATIVA FEMP

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